jueves, 3 de marzo de 2011

Bicentenario del General Menacho. Memoria.

El obelisco de 1893.

Fue erigido en 1893 por suscripción de los militares de Extremadura, disponiéndose de aproximadamente un día de paga de cada uno de ellos. Fue el último acto público que celebró la Capitanía General de Extremadura, desaparecida ese mismo año, mandada por el general Federico Ezponda y organizada la celebración por una Comisión compuesta por Julio Carande por el estamento militar, Cayetano Rodríguez Medina por el Ayuntamiento[1] y José Díaz Macías por la prensa local.

Hubo procesión cívica hasta el baluarte y se procedió a la inauguración, bendecida por el Obispo de la diócesis, Fray Francisco Sáez de Urturi, que pronto sería nombrado Arzobispo de Santiago de Cuba. Tras la misa de campaña y los discursos de rigor el general don José Gragera, decano de los militares de la plaza, hizo entrega de la obra al Ayuntamiento y la comitiva se trasladó a la catedral para rezar un responso ante la tumba del claustro. Terminando los actos con un desfile militar.

El obelisco está diseñado por el Ingeniero militar Julio Carande Galán y la ejecución es de los marmolistas y escultores Antonio Zoido y Antonio Almendros. La escalinata y el pedestal son de mármol de Alconera, la columna de Borba (Portugal) y las lápidas de mármol de Italia.

A grandes rasgos puede describirse como de planta sensiblemente cuadrada con altura de tres escalones, sobre los que se asienta el fuste de una columna que se prolonga en sus extremos hasta tomar planta de cruz griega, en cada uno de sus brazos aparece un león sedente sujetando una cartela con el escudo de cada una de las principales Órdenes militares españolas. El friso lleva en cada uno de sus frentes bajorrelieves con motivos y trofeos militares y sobre él se eleva una columna de orden jónico, acanalada y rematada sobre el capitel por un tulipán abierto cuya corola toma forma de bomba de artillería. La altura total del monumento alcanza los ocho metros.

La comisión gestora, para su construcción, la formaban: coronel de Caballería Pedro Calderón de la Barca, jefe del Regimiento de Caballería de reserva nº 6; teniente coronel de Infantería Aureliano Muñoz Manso, del Regimiento de Infantería “Castilla” nº 16; teniente coronel de Ingenieros José Albarrán y García-Marqués; teniente coronel de Caballería José Fernández de la Puente; capitán de Artillería José del Pozo y capitán de Ingenieros Julio Carande Galán.

Al hilo de esta celebración, el alcalde Cayetano Rodríguez solicita autorización, en 15 de septiembre de 1892, para construir una escalinata para acceder de modo cómodo y noble al citado monumento, ya que la que hay es de tierra y es necesario repararla de continuo, el proyecto de la obra es del arquitecto municipal Tomás Brioso, de septiembre de 1891, y la autorización del Ministerio de la Guerra es de 15 de octubre de 1892.



[1] Era Alcalde de Badajoz don Sancho Sanabria y Zancada desde enero, el anterior alcalde lo fue el propio Rodríguez Medina.

No hay comentarios: